El underground en pleno siglo xxi ya no es un conjunto de escenas localizables en diferentes ciudades del mundo, sino una escena global y virtual en el centro de internet, ese espacio digital inabarcable. Así pues, las transformaciones que experimente el medio van a definir la música electrónica del futuro. Mientras tanto, en los márgenes del mainstream se agitan cambios interesantes en el sonido del techno, la IDM y la vanguardia experimental.